El concurrido acto kirchnerista del viernes en el Patio de la Madera sirvió como plataforma de lanzamiento de Agustín Rossi para candidato a gobernador de Santa Fe en 2011. La prolongación del acuerdo que inauguró hace un año con Héctor Cavallero incluye que éste será candidato a intendente.
“¿Estuvo María Eugenia Bielsa?”, preguntaban ayer obeidistas y reutemistas metidos en el juego de empezar a armar el rompecabezas. Frente a la respuesta negativa, el interrogante que sobrevenía era: “¿Y desde qué lugar pensará jugar entonces?” La concejal y ex vicegobernadora no parece tener asignado un casillero.
Las piezas del rompecabezas adelantan entonces a Rossi como candidato a gobernador por el Frente para la Victoria; a Jorge Obeid por Santa Fe Federal si Carlos Reutemann va para presidente (si no, no); a Mario Barletta, Antonio Bonfatti, Miguel Lifschitz o Rubén Giustiniani en nombre de la entente socialista-radical, y algún que otro postulante por los partidos menores. Habrá que ver si el dirigente agrario Eduardo Buzzi encuentra pista de lanzamiento; ganas no le faltan.
Estos nombres son, hoy, los competidores que asoman.
Cómo explicarlo. Una reedición del Frente Grande, síntesis para ilustrar de qué se trató en parte el acto de Rossi, tanto por la composición del público como por otras figuras que participaron con entusiasmo.
El senador Miguel Pichetto y la titular del Central, Mercedes Marcó del Pont, arrastran poco y nada de parentezco con aquella fuerza orientada por Chacho Alvarez, pero la invocación vale igual. Se vio a muchos (ahora no tan jóvenes) antiguos militantes de aquel espacio desde un costado del peronismo.
Y vale la pena citar que uno de los momentos más emotivos de la jornada fue cuando apareció el socialista Jorge Rivas en la silla de ruedas a que lo condenó un intento de asalto; que el legislador hasta hace poco del Frente Progresista Marcelo Brignoni quedó a cargo del micrófono en ese momento; que al también diputado del Frente Progresista y gremialista docente José María Tessa se lo vio desde varios rincones; que había cuadros del Partido Comunista como Sergio Shillmann (bueno, el banquero y actual diputado kirchnerista Carlos Heller, añoso camarada del PC, fue también uno de los expositores) y del Partido Intransigente.
Recostado sobre ese perfil, el de un público que, como acertó un concurrente, “nos gusta ver 6, 7, 8” (por Canal 7), Rossi avizora el recorrido que lo llevará al desenlace del año que viene. Menos que en el desgaste del proyecto kirchnerista, cree que lo peor ya pasó y que lo que sobreviene es un tiempo de recuperación. “Había que salir vivos de la tempestad, y esta ocurrió el año pasado”, dijo.
Sí, por ahí pasó el análisis en la coqueta mesa del Ros Tower Rosario cerca de la medianoche, donde cenaron Pichetto, Rossi, Cavallero, Heller y unos más. “El acto fue muy bueno, me sorprendió. Lanzate Agustín que tenés un carril”, lo estimuló Pichetto. Frente a la burbujeante copa, otro borboteó: “Y no sabés cómo le puede llegar a ir a Néstor si se gana el Mundial”.
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